Fire, steel, and storms. 🔥🚁🌪️

Hey guys,
Today I’m back with the continuation of Tomb Raider, an adventure that’s really pushing me to my emotional limits. This chapter is incredibly intense, and I decided to give it a more narrative tone to better capture everything I felt.

I hope you enjoy it and that I’m able to convey, as best as I can, the essence of this journey.

Hola chicos , hoy vengo con la continuación del juego Tomb Raider, una vaentura que me esta llevando al limite emocionalmente, hoy les traigo un capitulo super cargado y decidi drale un tono mas narrativo para captar todo lo que senti, espero disfruten y ser capaz de transmitir lo mejor que pueda la esencia de este.

This time, there was no mercy. The chapter had barely begun and I was already running for my life—literally—through explosions, fire, and screams of madness. Tomb Raider shows no pity. The temple we had discovered collapsed with a nearly biblical force, and the roar of destruction chased me like a rampaging beast. Behind me, flames licked the walls like furious tongues, and all I could do was run, jump, and pray that the next ledge would hold my weight.

Esta vez no hubo tregua, apenas comenzaba el capítulo y ya estaba corriendo por mi vida, literalmente entre explosiones, fuego, y gritos de locura. Tomb Raider no tiene piedad. El templo que habíamos descubierto se vino abajo con una violencia casi bíblica, y el rugido de la destrucción me perseguía como una bestia desatada. A mis espaldas, las llamas lamían las paredes como lenguas furiosas, y todo lo que podía hacer era correr, saltar y rezar para que el próximo saliente aguantara mi peso.

And as if that wasn’t enough, one of those fanatical lunatics—seriously, these people look like they came straight out of a post-apocalyptic cult—appeared engulfed in flames, like a damn demon, and lunged at me just as I was hanging from a ledge after one of the most daring jumps I’ve pulled off so far. Everything slowed down—every move, every decision—it was one of those moments where the game becomes insanely interactive, so visceral you forget you’re even holding a controller. But I managed to break free. I pushed him off—or maybe he fell—I didn’t even think about it. I just kept climbing through the crumbling structures, with the fire threatening to consume everything.

Y por si eso fuera poco, uno de esos locos fanáticos en serio, esta gente parece sacada de una secta postapocalíptica, apareció envuelto en fuego, como un maldito demonio, y se lanzó contra mí justo cuando me encontraba colgando de un saliente tras uno de los saltos más temerarios que he hecho hasta ahora. Todo ocurrió en cámara lenta, cada movimiento, cada decisión, es uno de esos momentos en los que el juego se vuelve increíblemente interactivo, tan visceral que hasta olvidas que estás con un mando en la mano. Pero logré zafarme, lo empujé, o se cayó, ni lo pensé. Solo sé que seguí trepando por las estructuras en ruinas, con el fuego amenazando con devorarlo todo.

What came next felt like the beginning of the end—though honestly, I’ve thought that so many times on this island, I should probably stop being surprised. I managed to reach the helicopter that was trying to rescue me, and in a final, death-defying leap, I jumped and grabbed onto it. I thought we were safe… but of course not. Nothing is ever that simple here.

The pilot refused to land, even as I screamed at him to do it. I knew that storm wasn’t normal—there was something dark holding us here, like the island itself didn’t want to let us go. I shouted it at him, begged him to listen. But no one heard me.

Lo que vino después parecía el principio del fin, aunque ya he pensado eso tantas veces en esta isla, que debería dejar de sorprenderme. Logré llegar hasta el helicóptero que intentaba rescatarme, y en un último salto suicida, me lancé y lo alcancé. Creí que estábamos a salvo pero no. Nada es tan simple aquí ,elll piloto no quería aterrizar cuando le grité que lo hiciera. Yo sabía que esa tormenta no era normal, qe había algo oscuro reteniéndonos aquí, como si la misma isla no quisiera dejarnos escapar. Se lo grité, se lo supliqué. Nadie me escuchó.

And then, as if my words had been a curse, the storm hit us. Not just any storm—a supernatural tempest, almost mythological in its fury. It wrapped around the helicopter and brought it down like a leaf in a hurricane. Everything exploded. Everything went dark.

Y entonces, como si mis palabras hubiesen sido una maldición, la tormenta nos golpeó. No una tormenta cualquiera,un vendaval sobrenatural, casi mitológico, que envolvió el helicóptero y lo hizo caer como una hoja en la tempestad. Todo explotó, todo oscureció.

I thought that would be the worst of it—but I was wrong. When we crashed, still dazed and trying to catch my breath, one of those maniacs caught me off guard, hurling an axe straight at me. I didn’t have time to react—it was coming right for me. But someone stepped in. My friend, my guide. One of the few who had been by my side since the beginning. He was the one who took the blow for me. His sacrifice was so sudden, so heartbreaking, that for a moment I didn’t know whether to scream or just stand there, frozen.

Pensé que eso sería lo peor, pero no. Cuando caímos, aún aturdida, intentaba recuperar el aliento cuando uno de esos desquiciados me sorprendió lanzándome un hacha,no me dio tiempo a reaccionar, iba directo a mí. Pero alguien se interpuso. Mi amigo,mi guía. Uno de los pocos que ha estado a mi lado desde el principio, el fue uien recibió el impacto por mí. Su sacrificio fue tan repentino, tan desgarrador, que por un momento no supe si gritar o quedarme paralizada.

I’ve lost count of how many times I’ve been on the verge of losing everything since I arrived on this cursed island. But this time—it was different. It hurt. It hurt like the fire from the temple had moved inside me, burning me from within. I was furious, broken, helpless. That’s why I decided to end the chapter right there. Reuniting with the others, even if in silence, felt like one last attempt to hold onto something human, something that reminds me why I’m still fighting.

I need to breathe, and that’s why I’m stopping this chapter right here. Because this game, this story, this journey doesn’t let up—and I don’t plan to give up either. But I do need a pause before I keep digging into where this road will take me.

See you in the next chapter.

No sé cuántas veces he estado al borde de perderlo todo desde que llegué a este infierno de isla. Pero esta fue una más. Y dolió,dolió como si el fuego del templo ahora ardiera dentro de mí. Estaba furiosa, rota, impotente. Por eso decidí cerrar el capítulo ahí. Volver a reunirme con los chicos, aunque fuese en silencio, fue como un último intento de aferrarme a algo humano, a algo que me haga recordar por qué sigo luchando.

Necesito respirar y por eso dentendre este capitulo justo aqui, porque este juego, esta historia, este viaje no da respiro y no tampoco pienso rendirme, pero nececito tomar una pausa antes de suguir averiguando en que terminara este viaje.

Nos vemos en el próximo capítulo.

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